Sin duda 2020 ha sido un año atípico para cualquier negocio. La situación vivida ha provocado un inevitable descenso del volumen de ventas. Las empresas han debido reinventarse para sobrevivir y la apertura de nuevos canales de ventas en línea ha sido una acción prácticamente obligada en la mayoría de los casos. Las grandes empresas no están exentas de dificultades pero, para muchas PYMES y autónomos, la digitalización de su negocio ha supuesto un esfuerzo excepcional para tratar de evitar perder a sus clientes. ¿Vale la pena esta inversión?
La evolución de la venta online
No debería ser sorpresa para nadie cuando se afirma que la venta de productos en línea crece cada año. Las generaciones más jóvenes han normalizado la compra por Internet de productos y servicios y esta práctica se extiende cada vez más a otros rangos de edades.
A pesar de todo, se teme que 2020 traiga consigo un descenso en la facturación global de las ventas online debido principalmente a la parada del sector turístico, el responsable de la mayoría del volumen de facturación en Internet. Pero por otro lado las ventas en otros sectores -deportivo, formativo, belleza, etc.- están aumentando. Esto nos hace pensar que, aunque económicamente se está gastando menos -no es lo mismo comprar un paquete vacacional, que tiene un coste elevado, que uno o dos libros en la librería de tu barrio, ¿verdad?-, hay un mayor volumen de transacciones en general. El motivo es simple: si no es recomendable salir de casa para comprar aquello que necesitas, la solución a este problema simplemente pasa porque lo compres y te lo envíen a casa. ¡Muy sencillo!
¿Qué beneficios aportan las tiendas de venta online?
Las ventas en línea tienen beneficios tanto para el comprador como para el vendedor. Para el primero, éste puede disponer de un catálogo de productos más amplio, realizar su compra en cualquier momento del día y disponer de comparativas y combinaciones de los mismos de una forma sencilla.
Para el vendedor, las ventas en línea suponen nuevas formas de publicitar sus productos o servicios. Además, estos servicios estarán disponibles 24 horas al día, 7 días a la semana para sus clientes. Finalmente, la posibilidad de automatizar parte del proceso de venta y centrarse en entregar un producto o servicio de calidad es un aspecto crucial de las ventas en el mundo digital.
¿Debería ofrecer mis servicios online?
En el mundo digital debemos generar contenido que atraiga a estos posibles clientes a nuestra página web para conseguir que, finalmente, contraten nuestros servicios. Todas las ventajas comentadas no servirán de mucho si no somos capaces de conocer a nuestro cliente y ofrecerles servicios o productos que sean de su interés. Aquí muchos negocios que ya existían físicamente juegan con ventaja, dado que ya deberían conocer -o al menos tener una idea- de quién es su cliente, qué está buscando, cuáles son sus necesidades y cómo pueden cubrirlas.
¿Deberías considerar ofrecer tus servicios en línea? Definitivamente sí. Plantéate qué puedes distribuir por este nuevo canal y cuál es la forma más eficiente de conseguirlo (¡pst! Podemos ayudarte con esto). Céntrate en marcar un objetivo y desarrolla tu estrategia para conseguirlo. Existen diversas maneras de lograrlo y cada negocio debe encontrar su camino. En las siguientes publicaciones nos centraremos en las diferentes opciones disponibles para el empresario autónomo y las pequeñas empresas, los colectivos más vulnerables ante una crisis económica. ¡Vuelve pronto!